La implicación de los padres en la formación de sus hijos está unida a sus resultados académicos
El grado de implicación de los padres en la formación académica de sus hijos está íntimamente ligado con los resultados académicos que estos obtengan. Ésta es la principal conclusión del estudio 'La participación de las familias en la educación escolar', presentado hoy por la directora general de Innovación Educativa y Formación del Profesorado, Pilar González, en el marco de una jornada sobre las claves en la relación familia y escuela.
La publicación analiza las tres etapas educativas (Infantil, Primaria y Secundaria) y concluye que el factor que muestra una mayor influencia positiva sobre el rendimiento educativo del alumno es el sentimiento de pertenencia al centro. Le siguen la percepción de un clima educativo familiar supervisado, aunque con menor influencia que dicho sentimiento de pertenencia y con desigual impacto según el nivel educativo. En este sentido, se vincula “la ayuda en casa con las tareas escolares, cuyo impacto en Educación Primaria es alto, y lo es aún más en Educación Secundaria Obligatoria”.
“En Castilla y León siempre se ha dado muchísima importancia al papel de las familias y por tanto también a la relación de las familias y los centros educativos. Desde 2004 se vienen implementando una serie de medidas que tienen que ver con la modernización de las infraestructuras, de las asociaciones de padres y madres, con el asesoramiento jurídico a estas, y con la información y formación a las familias”, explicó Pilar González.
En este sentido, la directora general indicó que la Comunidad desarrolla un plan pionero en este ámbito, consensuado con las confederaciones de padres y madres de alumnos, aunque se vienen “buscando nuevas fórmulas y nuevos modelos”. De ahí la pertinencia, a su juicio, de este tipo de jornadas: “Creemos que ha llegado el momento de pararse a reflexionar qué es lo que está demandando nuestra sociedad qué entendemos por participación educativa y qué modelos de participación educativa son necesarios implementar ahora mismo”.
El estudio añadió, “nos va a proporcionar a las comunidades educativas, y en concreto a Castilla y León una visión moderna del nuevo concepto de participación educativa, y qué modelos y qué instrumentos nuevos tenemos para propiciar esa participación educativa”. El presidente del consejo escolar del Estado, Francisco López, destacó que la investigación “alberga los análisis empíricos apoyados en investigaciones efectuadas ex profeso para este estudio”.
Por su parte, Marino Arranz, presidente del Consejo Escolar de Castilla y León, afirmó que el fundamento del estudio es que “el profesorado y los centros se entiendan con las familias a la hora de tomar decisiones comunes, que vayan en la misma línea y que favorezcan, no solo al rendimiento de los alumnos sino también un clima escolar que facilite todo el proceso de enseñanza y aprendizaje”.
Recomendaciones para las familias
'La participación de las familias en la educación escolar' es una obra colectiva en la que han participado 14 investigadores bajo la coordinación de María Castro, de la Universidad Complutense de Madrid, y promovida por la Junta de Participación de los consejos escolares autonómicos. Su relevancia reside también en las recomendaciones que efectúa a las administraciones educativas, los centros docentes y las propias familias.
Entre las recomendaciones a las familias se encuentra la necesidad de que estas “sea cual fuere su nivel socioeconómico y cultural”, sitúen las aspiraciones académicas de sus hijos en un lugar elevado. “Esa tensión 'hacia arriba', con respecto a las posibilidades escolares de los hijos –quien quiere puede-, ha de formar parte de las convicciones de las familias, de sus prácticas educativas y de las actividades de formación promovidas por las AMPAs, y particularmente en los entornos menos favorecidos”, señala.
Otro de los aspectos que emerge de la investigación es el incremento de la importancia de la participación conforme se avanza en las diferentes etapas educativas. Así, cuando se alcanza la Educación Secundaria Obligatoria “disminuye sensiblemente la participación parental” y, sin embargo, “es en esta etapa donde su impacto sobre el rendimiento escolar es mayor”. Asimismo, se recomienda a los padres que contribuyan a generar en sus hogares actitudes de consideración hacia el profesor, así como tener voluntad de asumir objetivos educativos comunes y el propósito de llegar a acuerdos. Ello, señala el estudio, supone compartir información, responsabilidades, decisiones y resultados.
