La Diócesis de León ofrece casas rectorales y el seminario menor para acoger refugiados

El obispo de León, Julián López, ha asegurado que la Diócesis, ante la situación de la crisis de los refugiados que huyen de la guerra y que están buscando refugio en Europa, “está dispuesta a poder colaborar para hacer frente a esta auténtica catástrofe humanitaria con una obra solidaria que proporcione respuestas urgentes, eficaces, generosas y de verdadera caridad cristiana, incluso con viviendas. Tenemos muchas casas rectorales repartidas por toda la Diócesis y eso sería, en un primer momento, lo que podríamos inmediatamente poner a disposición porque además estoy seguro de que las propias comunidades parroquiales estarían dispuestas a ayudarles para que estas personas se pudieran establecer”. En este mismo sentido, en una entrevista concedida al programa El Espejo de la Iglesia Diocesana en COPE León, el prelado legionense aseguró que “también en la capital podríamos habilitar algunos locales: las dependencias del edificio del Seminario Menor de la carretera de Asturias se podrían poner a disposición si también es necesario”.

Junto a este ofrecimiento directo, el obispo Julián López ha hecho un llamamiento a todas las comunidades cristianas de la Diócesis para “acoger con una actitud de verdadero cariño y de verdadera solidaridad a todas esas personas y hacerlo desde la fraternidad que ya ha sabido demostrar la Diócesis porque esta no es la primera vez que hemos tenido que enfrentarnos a una situación de este tipo. De hecho, la Diócesis recibió hace tiempo a una familia de procedencia siria y le ofreció una casa donde están viviendo actualmente”.

“Desde el punto de vista de la emergencia que se vive en estos momentos ofrecer un techo es algo elemental y a eso podemos responder de manera rápida como solución urgente, aunque otras necesidades humanitarias creo que desbordarían quizá nuestras posibilidades”, reconoció Julián López, quien demandó “que exista algún tipo de encuentro, convocatoria para procurar la coordinación de todas las instituciones que de alguna manera pueden paliar esta emergencia humanitaria y desde luego la Diócesis estará allí, codo con codo, con otras instituciones que puedan prestar su colaboración”.

Y en esa línea de colaboración se centra el apoyo que la Diócesis de León presta a la Asociación Comisión Católica Española de Migración (ACCEM) que por impulso del sacerdote leonés y actual vicario episcopal de Asuntos Económicos y Sociales de Diócesis, Pedro Puente, se puso en marcha en el año 1991 desde la Conferencia Episcopal Española (CEE) como organización no gubernamental y no lucrativa que proporciona atención y acogida a personas refugiadas y migrantes para promover su inserción socio-laboral y la igualdad de derechos y deberes de todas las personas.

Desde su especialización como entidad centrada en el trabajo vinculado al derecho de asilo y a las migraciones en la actualidad ACCEM León dispone de tres viviendas con 18 plazas en las que residen personas que buscan obtener el estatuto de refugiados y además tramita en la actualidad expedientes de demanda de derecho de asilo para otras 38 personas.

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