El abogado de la hija de Carrasco tiene claro que “hay un planificador” tras los disparos de Montserrat

El letrado de la hija de la presidenta, Carlos Rivera, en un momento de la serie 'Muerte en León'.

C.J.D.

Tras el varapalo de la profunda brecha en la investigación, policial y judicial, del crimen que acabó con la vida de la presidenta de la Diputación y del PP de León, Isabel Carrasco, el 12 de mayo de 2014, abierta con el último capítulo de la serie de no ficción 'Muerte en León', toman fuerza las voces que o bien dudan de los errores de bulto la instrucción o bien sospechan de intereses ocultos para silenciar cierta parte de la investigación.

Y todo porque en el documental se demostraba, con todos estos argumentos, que nadie investigó a la persona, personal de confianza del presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, que hablaba todos los días con Triana Martínez incluso desde su despacho de Presidencia, y que mantuvo dos larguísimas conversaciones con la hoy acusada del asesinato de Carrasco el día antes de que su madre la matara de tres disparos y otra conversación más el mismo día del crimen.

Pruebas que “no hemos tenido ni el fiscal, ni acusaciones, ni defensa, ni policía ni jueza”

Con las dudas ahora generadas tras la investigación de los responsables de la serie emitida en Movistar+, Justin Webster y Enric Bach, cobran más fuerza algunas valoraciones tan sorprendentes de todo este caso como la que defiende Carlos Rivera, el abogado de la hija de Isabel Carrasco, Loreto.

Este letrado censura que “esa prueba no la hemos tenido nadie, ni fiscal, ni acusaciones, ni defensa, ni policía, ni jueza”. Y aunque no aprecia “ningún posible culpable ni hecho delictivo, de momento”, supone “un olvido de todos o una ocultación de alguien para que no podamos llegar ahí”, por lo que estima que “hoy caben todas las hipótesis”.

Carlos Rivera: “Alguien ha perpetrado esto”

Es, para Rivera, la guinda de un pastel enmarcado en una auténtica 'Teoría de la Conspiración' porque el letrado de la acusación, abiertamente y ante las cámaras, manifiesta su creencia personal de que hay un “planificador”, que no dudó en insinuar en el juicio como político y/o como pareja de Triana Martínez.

“Yo creo que hay aquí un planificador; yo a la madre (Montserrat González) la veo capaz de apretar un gatillo y veinte, pero no planificar cómo apretar... ni ir a comprar el arma ellas personalmente”, afirma, zanjando que “alguien ha perpretado esto”.

De hecho, suscribe a día de hoy buena parte de sus misteriosas preguntas en el juicio dirigidas a Montserrat sobre esa persona en la sombra: “¿Su hija tenía alguna pareja? ¿Quién le daba el dinero para pagar la hipoteca? ¿Era a cambio de algo? ¿Alguien la indució (SIC) a cometer el asesinato? ¿Quién es su pareja? ¿Es enemigo político o personal de Isabel Carrasco”. Preguntas que nunca recibieron respuesta en el juicio ante el jurado popular.

El fiscal: “No hay nada más”

Pero no es el único en valorar las relevantes evidencias de una brecha tan grande en la investigación. Los periodistas quisieron recabar la opinión de algunas partes en el juicio. Y por ejemplo el fiscal, Emilio Fernández, que conoció estos hechos a través de los responsables de la serie, aseguró: “Supongo que por la Policía no se consideró relevante (...) En el contexto de que se llamaban muy frecuentemente, no hay nada más”.

Pero en otro apartado no menos sorprendente, Fernández asegura ante las cámaras que tiene muy serias dudas sobre la teoría de la adquisición del arma homicida por parte de Montserrat González, poniendo en entredicho que, como se ha declarado siempre, fuera comprada a un drogadicto en Gijón que, muy oportunamente, murió poco después.

Beatriz Llamas: “Prefiero no pensar que se han ocultado esas pruebas”

Mientras,la letrada Beatriz Llamas, abogada de la acusación que ejerce la ex pareja de Carrasco, también tercia en las sorprendentes averiguaciones extrapoliciales y extrajudiciales del documental 'Muerte en León' y valora que “tendrán que dar explicaciones cuando se abran diligencias para explicar el contenido de esas llamadas, porque no es muy normal que incluso el mismo día del asesinato tuviera una llamada de esa persona con esa conexión directa que tiene, con esa relevancia”. “Prefiero pensar que es una negligencia, que no se ha visto, a que se han ocultado esas pruebas de manera deliberada”, añade.

Y la “hipotética” teoría del juez respecto a Gago

Por último, el documental sorprende también con las declaraciones del juez del caso en la Audiencia Provincial de León, Carlos Javier Álvarez, quien en respuesta a las críticas por haber rebajado sustancialmente las penas de cárcel propuestas por el veredicto del jurado, desgrana una llamativa hipótesis que afecta a Raquel Gago, amiga de Triana.

Se refiere a la posibilidad, hipotética, de que la agente de policía hubiera sido requerida por Triana para estar en el lugar donde ésta le introdujo el bolso con el arma homicida, pero explicándola que lo que le iba a dejar en el coche era un regalo sorpresa para su madre, por ejemplo. Y en todo caso, atribuyendo su comportamiento a un desconocimiento previo de la trama para asesinar a Carrasco. Cabe recordar que el magistrado ha sido el responsable, hasta última instancia posible, de admitir la condición de libre bajo fianza para Raquel Gago.

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