Luis Aznar: “José María Aznar decidió que no era bueno para la imagen del Gobierno que hubiera dos 'aznares'”

A pocos días de comenzar la campaña electoral, y ya de lleno dentro de la precampaña, el senador leonés por el PP Luis Aznar ha decido sacar a la luz un trocito de historia, y hacerlo en forma de libro 'Haciendo Memoria', que recoge, desde su perspectiva, los primeros años de democracia vistos desde la provincia de León y en el que abarca no sólo la política provincial, sino también los primeros pasos de la autonomía de Castilla y León y la consolidación de la democracia a nivel nacional. El periodo que se describe en este libro comprende entre los años 1977 y 1995.

Aprovechando esta publicación, Aznar ha hecho memoria de su recorrido político, que, según él mismo ha asegurado está “cara a la recta final” y ha desvelado alguno de los secretos de su trayectoria, siempre, o casi siempre, desde primera línea, y de algunos de los personajes con los que ha compartido trabajo, entre los que destacan cuatro expresidentes del Gobierno.

¿Por qué decidió escribir este libro y por qué lo hizo en este momento de su trayectoria?

El ahora es un poco cuando estoy enfocando la que puede ser mi última legislatura en activo y me ha parecido un buen momento para hacer balance. Son muchos años los que llevo en primera línea. Y ahora ya, cuando estas de cara a la recta final es el momento de hacer ese balance. Llevo un año escribiéndolo, he tenido que repasar mi documentación que ido guardando todos estos años, me ha llevado un tiempo prepararlo. Que haya coincido en estas fechas, preelectorales, ha sido pura casualidad.

¿A qué tipo de lectores va dirigido?

Yo creo que, en primer lugar, lo puede leer todo el mundo porque aunque contiene muchos nombres hay un relato que se sigue, creo yo, fácil y ameno, pero es un relato de la historia, yo no hablo de mí, hablo de lo que me rodea, la historia que se ha vivido en León en estos 18 años, pero siempre dentro del escenario de España, hablo de lo que estaba pasando en España, cómo lo vivíamos desde aquí, desde León y que es lo que estaba pasando en Castilla y León, que estaba en formación. Es un relato histórico y yo creo que en principio puede interesar a todo el mundo, también a la gente joven, aunque de entrada no pueda conocer a mucha gente de la que se habla aquí, pero sí es necesario que conozca como surgieron las cosas. La gente que lo vivió porque le va a permitir revivir todo aquello y la gente que no lo vivió porque es bueno que conozcan cuál ha sido la historia de León.

El libro abarca hasta 1995 ¿Habrá una segunda parte?

En principio no tengo pensado nada más, a día de hoy. Ahora estoy trabajando en otro libro sobre una etapa que a mí me parece apasionante de la historia de España, que son los últimos años de la monarquía de Alfonso XIII donde un antepasado mío, fue presidente del Gobierno, el almirante Aznar, y estoy escribiendo esa historia. Cuando termine con esa ya veré.

Dice que lleva muchos años en primera línea política, empezó en UCD y ahora es cabeza de lista del PP al Senado por León ¿Cuál es la receta para mantenerse tan arriba durante tantos años?

El único secreto es trabajar. Yo empecé muy joven y no siempre he estado en este nivel, ha habido algunas épocas que he vuelto a mi puesto de trabajo como funcionario del Archivo Histórico. Esto se hace a base de ilusión por la labor y luego trabajo, trabajo y trabajo, no hay otra fórmula que esa.

De toda su trayectoria, ¿Qué momento sería el más importante?

Es difícil, a ver yo destacaría sobre todo el tiempo en que colaboré más estrechamente con Adolfo Suárez, es un personaje que está en la historia de España ya, con el que tuve la magnífica suerte de trabajar muy directamente. Yo creo que esto para mí ha sido lo más satisfactorio. En segundo lugar, yo pondría la cantidad de gente buena que he conocido y con la que he colaborado a lo largo de estos años y como un momento, pues, una de las cuestiones más bonitas ha sido ser senador, yo creo que para un político puede colmar todas las aspiraciones que tiene. En mi caso, he sido portavoz de la Comisión de Interior por lo tanto mi principal dedicación ha sido todos los asuntos de interior que han pasado por el Senado, evidentemente, hay otra parte de la gestión que ha sido ocuparme de los temas de mi provincia, trabajo permanentemente en la minería, en atención a alcaldes... pero mi primera dedicación es la otra.

Ha trabajado con cuatro presidentes del Gobierno, ya ha hablado de Adolfo Suárez, pero ¿Qué destacaría de los otros tres?

Colaboré un tiempo con José María Aznar, en una relación complicada desde un punto de vista, y es que durante una primera etapa yo fui portavoz de la oposición a José María Aznar, en Castilla y León y, luego, en el momento que entré a formar parte del PP trabajé y colaboré con él en la etapa que fue presidente del Gobierno. Con José Luis Rodríguez Zapatero trabajé muchísimo en su etapa leonesa, él era secretario del PSOE en León y yo presidente del CDS, durante toda esa etapa trabajamos codo con codo durante muchos años. Y luego, con Mariano Rajoy, es el cuarto presidente con el que he trabajado, le conozco desde pequeño porque estudiamos juntos aquí en León. A partir de ahí hemos mantenido la relación y hoy día pues, en definitiva, soy su portavoz en el Senado en materia de Interior.

Y en el terreno más personal ¿Alguna cualidad o defecto que resaltaría?

Yo creo que todos tienen en común, por lo que les he conocido, pasión por España y pasión por la política. Luego, por ejemplo Adolfo Suárez tenía un encanto personal que conquistaba a la gente. En el caso de José María Aznar, era y es un tipo riguroso, más frío pero con una cabeza muy bien amueblada. José Luis Rodríguez Zapatero ha sido, en mi opinión, el más intrépido ha aportado una dosis de ilusión grande en un momento difícil y luego ha tenido momentos complicados que, en fin, seguramente no eran voluntad suya que se llegase a las situaciones que se llegaron. Rajoy es, por sus cualidades personales, la persona que ha coincidido en el momento oportuno para sacar a España de la crisis más grande que ha habido desde el momento de la Transición.

Corre el rumor que no formó parte del Gobierno autonómico de José María Aznar por apellidarse igual que él ¿Qué hay de cierto?

Es rigurosamente cierto, sí. Yo de hecho estuve durante 24 horas en su Gobierno, fui consejero de Fomento de la Junta de Castilla y León 'in pectore'. En el momento que hicimos el pacto de Gobierno, la coalición de Gobierno entre PP y CDS, a la que yo me había opuesto, también hay que decirlo, mi partido (CDS en ese momento) decidió que yo fuera uno de los dos consejeros de la formación. En un primer momento José María Aznar Aznar lo aceptó y a las 24 horas decidió que no era bueno para la imagen del Gobierno que hubiera dos 'aznares' en el mismo Gobierno.

Como testigo de la Transición y de las primeras elecciones democráticas ¿Qué fue lo que supuso ese periodo?

La mayor explosión de ilusión que yo he conocido, después de 40 años, los españoles votamos en paz y en libertad. Entonces, se abría ahí una puerta el 15 de junio del 77, se abrió una puerta que tenía muchas incógnitas, que había también muchos miedos, después de 40 años se conservan miedos, pero que a la vez nos situaba en le camino de llegada a Europa, de ser europeos de primera fila, de quitarnos todos los complejos que a lo largo de aquellos años de dictadura habíamos ido acumulando. Definitivamente borrar aquello de las dos Españas, se abrió una puerta ilusionante en la que participamos los jovenes y los mayores, yo no he vuelto a vivir desde el punto de vista político ningún momento como aquel.

En este momento, con el problema surgido en Cataluña y la amenaza del terrorismo yihadista ¿Sería necesario recuperar ese espíritu de la Transición?

Para eso y para todo. El espíritu que nos llevó a la Transición a acertar y a tomar las decisiones oportunas es lo que nos ha permitido estar hoy aquí después del mayor periodo de paz que ha habido en España en los últimos siglos, ese espíritu que ahora todo el mundo añora es imprescindible para resolver los problemas que tiene España. Hemos superado la crisis económica aunque quede mucho por hacer, pero nos queda un problema gravísimo que es separatismo en Cataluña, otros posibles separatismos que están larvados, pero que están ahí. Y para eso es necesario mucho diálogo, mucha búsqueda de consenso y otro elemento imprescindible que hubo en la Transición, sensatez, que es lo que no hay en este momento en los dirigentes catalanes. Eso es imprescindible. El otro problema, el del terrorismo, en España hemos tenido ya experiencias durante todos estos años de Transición y hasta llevar aquí con el terrorismo de ETA, y otros terrorismos, los hemos superado con unidad de todos porque si algo ha unido a los españoles ha sido la lucha contra el terrorismo y eso es lo que, si lo elevamos a Europa, será lo que haga que se supere este momento y se pueda vencer, sin ninguna duda, el terrorismo yihadista.

La percepción de los políticos ha variado mucho a lo largo de su trayectoria ¿Es ahora cuando más denostada está la política?

Ha cambiado muchísimo, en los primeros años yo creo que a los políticos se les valoraba, se les estimaba, y es una que se haya perdido este sentimiento. Probablemente es debido a los errores que se hayan cometido. Yo en eso no tengo duda, la culpa es de los propios políticos, pero creo que sería muy importante que después de una reflexión entre todos se volviese a valorar la actividad política porque esta actividad es fundamental para la buena marcha de una sociedad. Tanto los políticos como los ciudadanos tenemos que hacer un esfuerzo para volver a situar las cosas en su punto.

¿Piensa que sería también necesario un mayor esfuerzo por parte de los propios políticos para acabar con aquellos que manchan el nombre de todos?

Por supuesto, eso es lo primero, pero yo creo que eso se está haciendo. Sin ir más lejos en esta legislatura se han modificado un montón de leyes y disposiciones para que cualquiera que tenga conductas indignas sea penalizado duramente, yo creo que lo que había que hacer por parte de los políticos está hecho. Ahora también eso tiene que trascender a la sociedad y la sociedad tiene que saber valorarlo.